sábado, 31 de enero de 2009

Bornholm - On the Way of the Hunting Moon



Vuelvo con una solicitud de un visitante del blog, se trata de una banda húngara que ejecuta un black metal muy pagano y viene con un disco en el que si bien por un lado conserva resonancias del tradicional black metal, por el otro intenta brindar lo propio con el fin de cambiar la vieja rutina blacker tan explotada hoy en día.
Sus riffs son predominantes y melódicos, se han agregado teclados atmosféricos claros y sensibles aunque desdeluego no se abusa de tal recurso. La presencia de estos se incluye en los clásicos instrumentales en intros, a medias y al cerrar canciones en las que nos compaña la nostalgia generada por interludios con guitarras limpias como si la muerte fuera abriéndose paso en una noche fría entre pasajes boscosos como los de la portada.
Existe variedad, aunque el contraste de dicha no pase a campos experimentales como el uso de intrumentos folk. Hungría ya nos ha mostrado originalidad en esa área con bandas como Hexenwood y su black metal con prominente uso de elementos folkie; de la misma región surgen Ahriman y Fagyhamu que llegan con un black metal más contundente pero siempre tratando líricas de índole naturalista y otros aspectos muy paganos como conjuros relacionados con el misticismo lunar.

Bornholm suele ser épico cuando surge inspirado en batallas interminables contra legiones invasoras, es ahi cuando aparecen veloces blastbeats y sus guitarras nos regalan riffs largos y melódicos que se vuelven atmosféricos y potentes, los teclados en el fondo envolventes al estilo Summoning, incluso aprovechan para meter una voz limpia como si narrando los versos de una profecía milenaria o anunciando los oscuros e inevitables prefacios del oráculo. Me hubiese gustado que le dieran mayor atención a ese detalle y es que la aparición de esa voz viene a ser realmente muy escasa, creo que sólo en su tema inaugural se ha incluido. Por otra parte la voz dominante es raspada y muy gruñona, pero tiene sus momentos en que el delirio llega a sonar podrido y cansado. También se dejan partes para ritmos lento con riffs muy atrevidos, quizás en busca de algo diferente como se muestra en su tema "Acheron" el cual en mi opinión es el peor del disco por la imprudencia que genera al ir con un ritmo de balada que hasta incorpora riffs de heavy metal al fondo combinados con la rasgada pero nada brutal voz blacker.

Si hablamos de influencias, la música habla por si misma. Por ejemplo en su canción "The Age of Death Blood and Iron" es curioso pero se puede observar influencias del black sinfónico de los noruegos Limbonic Art en su eminente "Moon in the Scorpio" ya que aparte de sus teclados, el doble bombo lleva un sonido claro y limpio asi como sus guitarras más melódicas y fuertes que nunca, además que hay un gran tramo instrumental que me recuerda a las atmósferas astrales de los noruegos.
En sus primeras canciones hay más partes con tranquilos interludios de guitarras, los cuales desembocan con riffs que insisiten en desgarrar carne como con navajas oxidadas, lo cual nos daría una idea de lo chirriantes y fríos que se vuelven cuando retoman los viejos y clásicos libros de Varg Vikernes.
Para concluir opino que el disco en terminos generales viene aceptable, aunque les hubiese venido mejor experimentar un poco más; talvés agregando flautas y guitarras acústicas a sus teclados pero eso lo dejo como criterio personal.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La calma precede a la oscura tormenta. Guitarras afiladas, un buen sonido de base tanto en bateria como en bajo. Las voces, tremendamente agresivas sin perder diccion, nos acercan al viento del norte, racheado, con teclados de fondo orquestal dando melodias que desarrollan despues las guitarras. La tormenta se despliega en todo su poder. Las estructuras son un poco mas abiertas que el black puro, ciertos toques muy melodicos en guitarras y bajos cercanos tal vez al folk. Un buen comienzo para un disco.
Lo que decia de la melodia se destaca en el comienzo de la segunda cancion. Blastbeats entremezclado con teclados, sin tomar ninguno el papel protagonista, todo al servicio de la musica. Los toques acusticos tienen cierta clase, y las rupturas, si bien algo tipicas, son necesarias para tomar aire (lo digo sobre todo desde el punto de vista del musico). Me recuerdan a los primeros tiempos de Suidakra (Lupine Essence), con esa epica rozando el power metal pero con la agresividad mas bruta del black, o a los ultimos tiempos de Immortal (Sons of the Northern Darkness), alejados de un black puro que (en mi humilde impresion) nunca practicaron.
El himno a los dioses paganos demuestra que no es nunca un black puro, sino que se afanan en combinarlo con elementos de otros estilos de metal lo que da cierta frescura al conjunto total de los temas. Acheron y su medio tiempo con ciertos contratiempos, hablan de esa mezcla de estilos que me sigue recordando a los ultimos tiempos de Immortal, con toques mucho mas heavy rotos solo por la voz mas rasposa de lo que el estilo musical indica. A mi me gusta, no la cancion en si (que es verdad que rompe un poco ese fluir black pagano) sino el resultado de la mezcla (parte oscura, parte heavy, machacon en cierta medida viking,etc...).
La quinta cancion formula un retorno al black estandar, con blasting y un bajo apisonador, con unas guitarras agresivas. El teclado lleva toda la carga epica de la cancion, para descargarlo en el "estribillo" melodico con el que termina el tema hacia las guitarras.
La oscuridad se cierne sobre la musica con un cantico (instrumental) a las Nornas. Guitarras limpias, que nos devuelven a la calma de la vida que acaba en silenciosa muerte... las Parcas hacen y deshacen a su gusto.

La produccion tiene muy buen sonido y con una mezcla de instrumentos que para mi es casi perfecta, donde puedes distinguir todos y cada uno de los mismos si bien ninguno sobresale por encima del resto (incluso el teclado, que no se porque extraña razon se pone siempre tan alto, cuando a veces solo enguarra el sonido).
Tal vez alguno de los temas tenga algun minuto de mas (por ejemplo Hymn to the..., o Acheron), pero al ser una demo corta (35 min.) se hace muy llevadero. Sin embargo, las dos primeras canciones del disco y la instrumental del final me parecen las mejores del disco.

Estoy de acuerdo con la opinion de que tal vez el experimentar algo mas de lo que lo hicieron no hubiese venido nada mal, pero por el resto de cosas que se dice, creo que tal vez la experimentacion que yo esperaria (mas cercana a lo que hacen en Acheron, aunque tampoco asi, no se como explicarlo...) seria contraria a la del comentario y viceversa.