lunes, 8 de junio de 2009

Heinrichreich - Druid



Tenía ratos de no enterarme sobre algotro grupo de black metal celta del que da gusto escuchar, aquel que con honor recuerda el estruendo de las espadas y vuelve memorable el correr de la sangre en los campos de batalla; aquel que armoniza al lado de la naturaleza y rinde tributo a los dioses ancestrales mediante cánticos mágicos y festivales inmortales como Samhain.
Esto que presento es una idea individual de un eslovaco ahora residente en Irlanda, al ver el nombre de su proyecto más de alguno podría pensar en decadencias, (quizá sea de lo poco que habrá corregir) pero no debe irse por ese sentido, Heinrichreich es un nombre que puede generar confusión, aunque el verdadero motivo de este nombre se debe únicamente a la poca originalidad para nombrar. Este tipo (Heinrich) no pudo pensar en algo mejor que llamarlo: su "reich". A decir verdad, es algo que poca importancia tiene cuando se analiza lo que él junto a su esposa han hecho musicalmente, y es que desde la francesa Heol Telwen (para mi el mejor grupo en el estilo celta) no me deleitaba con una nueva dosis de agresividad pagana. Si bien "Druid" está todavía lejos de lograr la gran elaboración de los franceses antes citados, en este debut se muestra una propuesta muy interesente como veremos a continuación.

De entrada damos con que se trata de una banda celta, comenzando con una cara que se asemeja mucho al "Spirit" de los suizos Eluveitie, aunque (como veremos más adelante) su forma no está tan cerca como podría alguno pensar, quizás su lado acorde vaya encaminado hacia a Cruachan, y es que no se puede hablar de Irlanda ni del Celtic black metal sin hablar de este grupo, bien sabido es que ha hecho una de las más grandes escuelas europeas del estilo gaélico. Así nace un disco compuesto por diez canciones que a mi criterio se queda corto, ya que la mayoría de ellas apenas rondan los tres minutos, sin embargo los instrumentos autóctonos de la tierra irlandesa dejarán un buen sabor de boca a pesar de ser sutiles y no tan frecuentes. Por cierto, es su esposa quien está a cargo de todo arsenal folklórico (flauta y bodrahn sobre todo).

Así inicia su intro, una instrumental como ya es clásico en este tipo de grupos; como abriéndose camino entre pasajes ocultos de los bosques para introducirse a los días de antaño. Y su segundo tema vaya que es un agradable recibimiento, se puede sentir la brisa sobre los cabellos y escuchar el correr del río en lo más profundo de la naturaleza. Así la fuerza blacker será desatada, una voz chirriante que hace eco como si procede de alguna caverna; sus guitarras quizás no sean lo mejor del grupo, son muy distorsionadas y sucias hasta el punto de no distinguirse. Su batería no me deja convencido, mantinene un golpe que no reconozco como influencia blacker, mas aún, enfrentamos tiempos Thrash debido a la evidente sincronización que lleva su baterista, agreguemos a esto el detalle de distorsión en sus guitarras y así se reunen varios aspectos muy característicos actualmente de dicho género; para más detalles que mejor que citar sus temas "Blood and Soil" e "Immortal March".

Sus momentos folk no pasan del todo desapercibidos, son quizá de lo mejor del disco, acompañándose de una voz que en conclusión podemos volver aceptable. También incluyen un teclado para dar con aires de atmósfera que emulan ambientes de grupos eslavos como Nokturnal Mortum, Concubia Nocte, Žrec y otros cuantos más. A mi criterio aún queda un par de cosas que afinar en Heinrichreich, quizá la de mayor prioridad sea eliminar esa influencia thrash; considero es el factor generador de canciones tan cortas que casi siempre pasan desapercibidas. No estaría mal desecharla y sustituirle por una fina y elegante atmósfera. Más allá de eso, no deja de ser un disco llamativo y con temas realemente buenos como su "Dying Emotions" y "The Legend Of The Banshee" donde me he dado mayor gusto con sus momentos de auténtico Black-Folk. Es un disco que disfrutarás si te han gustado otros que van por o cerca de la misma línea: Heol Telwen, Korpiklaani, Finsterforst, Nokturnal Mortum, Arkona, entre otros.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tras escuchar el disco se me viene a la mente una palabra: mezcolanza. Una total, y a veces ciertamente caotica, mezcla de tantos elementos.
Para empezar el folk no es presencia uniforme en todo el trabajo, pero si que se respira en todas las notas de los temas, y siempre aparece en todos ellos, tanto en forma de melodia como en instrumento (es decir, puede ser la introduccion de un teclado o flauta en el devenir del tema o que la melodia de la cancion sea mas cercana al folk pero realizada por los intrumentos electricos) y en algunos mas que en otros, evidentemente.
Luego el black si que es cierto que no se rije por los estandares habituales del genero, sobre todo cuando se mezcla con el folk. Sin embargo, y aqui es donde mayormente discrepo con la opinion de la introduccion del disco, opino que la huella black es grande. Y no porque no crea que hay muchos elementos thrashers, sino porque creo que si escuchasemos mas detenidamente a grupos pioneros (y que por tanto estan mas "alejados" del estandar black "normal") como Venom o los mismos Bathory antes del Hammerheart tal vez viesemos que estos no estaban tan lejos del thrash (y recordemos que el nacimiento y evolucion de ambos generos es casi simultanea en el tiempo, mediados los 80) y muchos tenian incluso elementos comunes. Si vemos por ejemplo la extension de los temas de las dos bandas antes citadas no se diferencian en gran medida de las de Heinrichreich, media de 3-4 minutos o incluso menor. Y pregunto ahora: son por ello menos blackers? Yo creo que no.
Evidentemente se le pueden achacar ciertos errores propios de un primer trabajo. El sonido de guitarras es para mi lo peor del disco, demasiado sucio y esto enguarra de mas la mezcla. Las baterias (estan programadas, verdad? o tengo el oido tonto hoy) deberian hacer algo con ellas, buscar otras sonoridades no tan estridentes. Los teclados, cuando no hacen atmosferas sobre todo, a mi a veces me parecen superfluos. En las voces eliminaria gran parte del reverb, en busca de algo mas duro y compacto que tal vez le quedase mas agresivo y tuviese mas contundencia...
Pero todo eso no deberia empañar un trabajo que en terminos generales cumple su cometido tanto blacker como folky. Ademas, el aspecto de tener canciones cortas a mi no me ha desagradado y a mi modo de ver le da cierta frescura. Y el que no llegue ni a los 40 minutos me parece un total acierto, que evita repeticiones superfluas y alargar mucho algunos temas, a pesar muchas veces de eliminar cierta atmosfera que en el blak-folk son tan habituales hoy dia.
Por tanto mi conclusion seria que no es un gran trabajo pero si nos enseña un grupo al que deberiamos seguir en el futuro, ya que tiene el potencial de hacer cosas mucho mejores que este "Druid".

Særuman dijo...

Que tal, de paso agradezco cada comentario que has hecho durante todo este tiempo.

No me queda la menor duda que has sido claro y acertivo en tu comentario, sobre todo cuando haces referencia a las raices que compartían dos estilos que hoy en día poco se asemejan. Partiendo de esto y analizando lo que en concepto se tiene como BlackFolk/Pagan, (ojo que no me refiero a un estilo invariable o sin tendencia a cambiar) la visión contemporanea que se tiene del Thrash muy poco o casi nada se le vincula con el Folk o Pagan; y es que muchos (y quizás la mayoría) de los grupos de este tipo (incluidos Moonsorrow, Drudkh, etc) prefieren tomar la influencia con mayor presencia de atmósfera, propia de leyendas como precisamente Bathory en Hammerhearth, de ahi esos temas arriba de 8, 9 minutos con mucho ambiente que tanto ha caracterizado al estilo pagano actualmente y que da para mucho gusto; quizá de ahi que un listado de canciones con tan poca duración dé la impresión de poca relación con el Pagan.

Cierto es que Heinrichreich no está perdiendo su esencia blacker históricamente hablando, el Thrash no contribuye a eso en lo absoluto (como ya dijiste), pero hay que recordar que la historia del black no termina ahi, luego de la segunda escuela (el black ya normal) hubieron muchos cambios, y es precisamente una influencia muy fuerte en el estilo pagano, (y remitiéndose al Bathory atmosférico, no al thrasher) mientras que el Thrash formó su camino donde en mi caso ya no me interesa seguirlo.

Concuerdo también contigo en que se debe imponer mayor contundencia en las voces, las gitarras sonn horribles y debería haber una duración justa para ser un disco de "larga duración". Sobre lo de la batería no sabría decirte, da la impresión de ser programada aunque en su sitio web hablan de miembros anónimos..

Un saludo y gracias por tu comentario..

Anónimo dijo...

Gracias a ti tambien Saruman, gracias a ti.

Es cierto que tanto el thrash como el black (en cualquier variante de ambos estilos) han seguido desde los 90 caminos diferentes, y

esta evolucion ha hecho que ambos se desvinculen uno del otro.

Han sacado muchos elementos agresivos para acercarse mas a otros estilos (Drudkh, que mencionas arriba, me parecen tener

caracteristicas muy doom, por ejemplo).
Y es que tanto las tematicas como los "malditos" estandares en el black, pagan y folk (quien sabe muchas veces donde esta la linea

que divide) se alejan muchas veces de esa agresividad que traian del thrash y el death.
Te imaginas intentar describir un atardecer soleado con blastbeats y una voz chillona? Bien, sabemos que todo es posible (mas aun en

la musica), pero a mi personalmente no me parece adecuado, no me lo evoca.
Pero eso no quita para que cada uno, cada musico o aficionado, tenga visiones de un mismo tema totalmente opuestas y por tanto

desarrolle una musica que lo evoque, de formas opuestas. Ademas, cada uno tiene su propio desarrollo musical (lo que todo el mundo

llama influencias, vamos) y esto tambien se plasma, aunque sea de forma indirecta, en la musica que haces.
Es por tanto que cada dia que pasa me doy cuenta que al final lo importante no es si esto es pagan verdadero o no (ni siquiera

tampoco en saber que es el pagan verdadero), sino en si te gusta o no te gusta.

Un saludo y gracias por los descubrimientos que me has proporcionado. Siempre es un placer conversar contigo.