miércoles, 4 de marzo de 2009

Marțolea - Gâlmele Întunericului



Los nuevos proyectos paganos están a la orden del día en Europa y Rumanía no es la excepción. Me complace introducir a una nueva joya en un estilo que no deja de abrirse paso alrededor del mundo. Esta vez se trata de una idea individual a cargo de Alin Drimus, quien es más conocido por haber contribuido en Negurã Bunget las partes de flauta de su último disco "OM". Su proyecto ha sido catalogado como black-folk, cosa que hasta cierto punto es válida dado que estamos ante un demo autoproducido de modesta calidad que incluye guitarras rudas y sucias mientras sus partes con batería frecuentan los tiempos medios, sin embargo sólo hay una voz al mando y no es la típica rasgada, sino que tiene un tono muy sombrío y misterioso que va muy acorde a lo que sus letras cuentan. Sus partes de folk son sensacionales y están estréchamente relacionadas con ese tipo de voz pagana, ya que los instrumentos de aire vienen con una intención oscura y muy melancólica que bien reflejaría la tranquilidad de una tarde triste en los montes cárpatos de las tierras rumanas.

Ese tipo de instrumentos folk son (como era de esperarse) de tradición en Rumanía, actualmente todavía son utilizados por personas apasionadas en preservar las viejas tradiciones y costumbres de su tierra. Como bien he dicho, esa tranqulidad de sus momentos folk crea la apariencia perfecta frente a la expresión de su música en concreto, ya que otorgan una atmósfera única con sabor a un folklore de antaño que es todo un canto a la naturaleza. Entre esos instrumentos aparece una trâmbția que ya hemos visto en las entregas de Kroda, es un instumento de tres metros de largo y produce un sonido grave y relajante como el del cuerno, está hecho de picea y cubierto con corteza de abedul, aún es usado desde las montañas Rarău para enviar avisos y señales. Se dice que las partes con trâmbția incluidas en el demo fueron grabadas en los alrededores del río Moara Dracului. Aparece una flauta que llaman kaval y ya la hemos visto en grupos como Hexenwood y Ahriman, este instrumento posee un tono bajo y tibio que bien produce en el alma una sensación plancentera de melancolía. Las kavals usadas en esta grabación fueron hechas de árbol de cereza. La drâmba es también fundamental en sus arreglos folklóricos, ha estado presente en Rumanía y en muchas otras culturas desde tiempos ancestrales por lo que frecuéntemente se dice que es el instrumento más antiguo de mundo, es conocido en la actualidad como arpa de boca y la hemos visto muy seguido en bandas como Folkearth, Nokturnal Mortum, Arkona, Heol Telwen, Yggdrasil y un gran etcétera. No podían faltar las flautas convencionales mediante tonos medios y altos, estas se fabricaron usando madera de árbol de antaño.

En sus temas se puede encontrar muchos detalles sobre historia de espíritus ancestrales y mitológicos de la cultura rumana, como en su "Fata Pădurii" quien se dice es un hada de cabello largo y verde que encanta a los jóvenes que encuentra a su paso conduciéndolos a la locura y dejándolos perdidos para siempre en el bosque. El idioma de sus letras es desde luego el rumano y con cinco canciones breves claro que nos deja pidiendo más. Recuerdo que hace algunos días se me sugirió este demo que quizás apenas se conocía en su país de origen, seguí de cerca las noticias y descubrí que el tipo recién ha inaugurado su sitio web, ahi se encuentra en descarga gratis este demo, ya que sólo Rumanía conocerá el original. Alin afirma que desafortunadamente es poco probable que su demo pueda salir de su país, esa es la razón por la que lo ha dejado en descarga para que podamos revisarlo.


1 comentario:

Anónimo dijo...

En ciertas ocasiones las cosas buenas vienen en frascos pequeños, en este caso el frasco es de apenas 20 minutos, lo cual hace que me quede con la sensacion de haber volado entre las canciones, sin haber disfrutado apenas de todo (tal vez en consecutivas escuchas del trabajo llegue a apreciar todos los matices).
Nos encontramos ante un trabajo oscuro, muy oscuro, con tintes tal vez depresivos, rotos por ciertos momentos folk, que a pesar de seguir siendo oscuros, dan cierta "alegria" al conjunto. Tanto la musica como esa voz lejana al standard black nos tranportan a lugares llenos de nieblas, bosques humedos y perdidos, parajes de ensoñacion melancolica. Lo cierto es que ciertos elementos como las guitarras distorsionadas y toques en la bateria son las unicas señales de black en toda la produccion, que de no tenerlas no dejaria de ser una obra folk tan solo (oscuro, pero folk al fin y al cabo).
La obra puede escucharse casi como una sola cancion, sin cortes perceptibles entre ellas, lo cual a mi parecer le da un toque mas oscuro aun si cabe. Ademas la voz tampoco varia demasiado la forma de cantar entre tema y tema, dando mas enfasis todavia a lo antes expuesto. Todo al servicio de esa idea.

Se nota que Drimus tiene amplio conocimiento en instrumentos de viento, que exprime a lo largo de las canciones con gran profusion, pero el resto de los instrumentos quedan a veces tapados por ellos (tal vez tambien la produccion apagada de los demas contribuya) y en ocasiones me parece que no los desarrolla de la forma que lo haria un instrumentista convencional. Es por tanto que el resultado es desigual en muchos momentos del disco.

Temas a destacar no podria, tan solo fragmentos del conjunto, por lo que diremos que, como nota final, el trabajo es ideal para momentos oscuros y tranquilos.